miércoles, 30 de septiembre de 2009

LAS MEGAOBRAS

Por:Diego Escobar Cuellar CUT - Valle del Cauca Un cobro injustificado para el pueblo caleño y que se quedará en manos de la corrupción de esta rancia oligarquía, como es que en un solo paquete van a proyectar y poner en práctica 21 obras de infraestructura para la ciudad, es verdad Santiago de Cali es una ciudad cosmopolita con calles de pueblo, pero es por falta de políticas de los gobernantes de turno, el atraso es su culpa y no la culpa de los 2 millones de caleños, que nos informen porqué a una calle municipal se le pretende imponer peajes, cuando esta modalidad de cobro por circulación es para las vías intermunicipales o nacionales, pero como todo es para el capital privado y la vía se hará por concesión a estos se les beneficiara perennemente, y para proyectar los sistemas de transporte masivo a futuro, porque la primera y segunda fase fueron un rotundo fracaso para los inversionistas (Blanco y Negro, Azul Plateada, Verde San Fernando, Coomoepal, Papagayo), y que seguramente tendrá como consecuencia directa que los compañeros de los jeepetos por ser transporte informal no puedan ingresar a las nuevas supercarreteras. Igualmente no se ha comprometido en estos proyectos a la Nación ni al Departamento, se inicia con unos cobros dinerarios con descuentos por cancelación inmediata y por notificación personal antes de la fecha pactada, pero el recaudo que pasará con ello, para dónde irán los dividendos de los dineros recaudados toda vez, que las obras se inician en un período de cinco años, como es que vuelven a cobrar el hundimiento de la carrera 1a y la anterior obra no la ejecutaron, porqué desmembraron la secretaría de obras del municipio, si sabían que se iban a realizar obras de infraestructura que requerían de la utilización de toda la maquinaria y personal del Municipio sin tener ningún sobrecargo. Que las obras que si requiere Cali, las cancelen los que se han usufructuado los dineros y recursos del municipio, los empresarios que han desangrado y esquilmado a la clase trabajadora caleña; los comerciantes en últimas que requieren de una optima presentación en sus fachadas para supuestamente poder vender sus mercaderías, esta clase opulenta y con dineros hasta en los tuétanos es la quede cubrir como retribución a su trato indigno y humillante para con el pueblo caleño. Un lote del barrio Petecuy no debe cancelar el triple de lo que cancela un predio en San Fernando, El Caney o Ciudad Jardín pues se debe tener en cuenta el proceso de estratificación del barrio o de la loza urbanística, no las mejoras que el propietario le ha realizado a sus inmuebles, porque esto sería una reforma inconsulta al sistema de cobro predial. Por último, responsabilizar al Alcalde JORGE IVAN OSPINA y al CONSEJO MUNICIPAL en pleno de las consecuencias administrativas y económicas que recaerán sobre el pueblo caleño, porque ellos fueron los que orquestaron este desangre popular, Cali es la ciudad del cielo pero única y exclusivamente para quienes tienen el recurso de vivir en el "Cielo" a los que nos toca vivir en el infierno, a los pobres nos toca acarrear con todas las inequidades políticas y sociales de los gobernantes, quienes llegan a sus cargos por votación del pueblo que cree que lucharan por esos ideales pregonados y cacaraqueados en Campaña y cuando se sientan en sus escritorios cambian su discurso popular para convertirse en unos perros falderos del capital privado.

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